" La testosterona ya no está de moda..."
Esto parece estar sucediendo ya desde hace décadas, y los que ya cumplimos los cincuenta, lo notamos, más si cabe.
Con esto, no me refiero, a estados de de salud físicos, ya que ní soy médico, ní daría un duro por serlo, aunque admiro esta profesión.
Utilizo, el término "testosterona" de forma metafórica, en parte de su definición y con esto me explico y entendereís el motivo de esta publicación.
Los hombres de mí generación , esa del 68, anteriores y alguna , década , más a posteriori, teníamos un concepto, no sé , si equivocado, o no, de lo que era ser un hombre, en aquellos , " buenos tiempos ", ser un hombre llevaba, implícito, ser fuerte, valiente, vigoroso, combativo, duro, inteligente, ya en la adolescencia, nos preopcupaba, el nacimiento del pelo en el pecho, la barba o el bigote, en definitiva , quizás lo que hoy se denomína, prejuiciosamente, " Un Macho Alfa ", de esos que dicen, que marcan el territorio...
Pués , sí tambien en nuestra época, los hombres , " marcábamos nuestro, Territorio ", en infinidad de situaciones, ya fuera en competiciones deportivas , en los estudios, en el trabajo, o en nuestras relaciones , amorosas, quién , no se ha envalentonado, en un partido de futbol, o ha " sacado pecho ", para cortejar a una dama , o por infinidad de cuestiones , que como, hombres, creíamos, que debíamos de defender, a capa y espada, eso sí , primeramente, con el intento del convencimiento, oral, con palabras y ejemplos, pero una vez terminado, este y sin más recursos, recurríamos, a ese enfrentamiento, más, allá de lo verbal, utilizando aquel, " Idioma internacional " , que entendía todo el mundo, que era el de los puños, donde se resolvía la afrenta, " como caballeros ",
" Caballeros " que después de resolver, la afrenta, y uno más tocado, por lo normal, que el otro, con algún ojo morado, o algún labio partido, muchas veces , firmaban un " armisticio " en alguna barra de algún bar y terminando, aquella afrenta, con la consecución de la paz y una , nueva y duradera, amistad...
Pero, parece ser , que por gracia, o desgracia, esto, va desapareciendo.
Esa antigua y para algunos, incívica y rancia, forma de actuar,
ya no está de moda, ahora toca...
Como lo digo sin ofender a nadie... ¿Afeminarse?
Quizás no sea el término más adecuado., pero no encuentro otro.
Sepan disculpar, mí falta de léxico adecuado.
Ante todo lo dicho, han cambiado, los " Roles " y no digo que para mal, aunque, todo exceso y radicalismo, es malo.
Pero quizás , se estén llevando las cosas cosas a puntos, extremos.
El hombre , tiene diez veces más , concentración de testosterona, que una mujer y no sólo eso ,produce , 20 veces más testosterona diariamente, que la mujer, otro punto de desigualdad, física, entre ambos.
Ante esto, la testosterona, aumenta, el nivel de competividad y agresividad, algo que controlado, no debería ser perjudicial y si muy beneficioso.
La mayor presencia de testosterona , en el hombre , lleva consigo un mayor, nivel de energía y actividad, haciendonos más activos y cuanto más activos , más testosterona generamos, ante esto , es muy recomendable el ejercício físico, para las personas que tienen bajo el nivel de esta hormona.
Ante esto, nuestra sociedad cambiante y manipulada, por modas y otras acciones, intenta hacer ver , a las nuevas generaciones que , ser un hombre, de aquellos de " pelo en pecho " de aquellos que protegían con sus vidas, sus principios y a sus damas, son agua pasada, antiguas , ideas o principios, intentandolo cambiar, por una imagen , de un hombre , poco viril, depilado, afeminado, de fácil intimidación, pacífico en grado máximo, hipertolerante, quizás todo lo contrario, de lo que se denominaría, ser masculino, ser varón , ser hombre.
Tampoco, se debe de ser hipermasculino, cuidado todo extremo es malo, pero tampoco, caigamos, en ciertas teorías actuales, aue quieren convertir al hombre en un muñeco, un títere, un ser sin caracter , sin temperamento y lo peor de todo, en un ser sin testosterona...
Debemos seguir siendo hombres ,adaptandonos, a la época actual, pero sin dejar de ser hombres... No olvides núnca lo que eres...
Que no te cuenten milongas...
Un Saludo Manolo Corral.
EA.-1.I.I.R.
La Coruña - España
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